La difícil situación vivida por la pandemia ha ocasionado que algunas empresas se encuentren con una falta de liquidez para hacer frente a sus pagos. El concurso de acreedores es una herramienta que permite a nuestros negocios renegociar las deudas con los acreedores, mientras planificamos un uso eficiente de los recursos y la viabilidad de la empresa.

Fases del concurso de acreedores por falta de liquidez

Tras una resolución judicial que estima el concurso, la fase común finaliza con la valoración de las masas activa y pasiva que posee la empresa. Esto permite, entre otras cosas, clasificar las deudas en especiales, generales, ordinarias y subordinadas.

El convenio

En esta fase, tanto el deudor como los acreedores pueden presentar sus propuestas de convenio. Deben contener proposiciones de quita, espera o ambas, y detallar un plan de pagos minucioso. Estas propuestas deben permitir forzosamente la continuidad de la actividad empresarial o profesional del concursado.

Una vez presentadas todas las propuestas, se reúne la junta de acreedores y se vota la opción más favorable a sus intereses. Si la alternativa elegida no posee ningún defecto ni infringe ninguna norma, el juez aprueba el convenio.

La liquidación

Cuando procede la liquidación, el administrador concursal pasa a serquien gestiona la empresa. Pone en venta todos los bienes del deudor para pagar el mayor volumen de deuda posible con el orden de prioridades que determina la ley.

La calificación del concurso de acreedores

En este momento, se produce la evaluación sobre el concurso con el fin de calificarlo como fortuito o culpable. Para que sea considerado culpable, debe apreciarse dolo o culpa grave del deudor.

Si no tienes dinero, busca asesoría

Para todos los escenarios posibles y fases, es importante que las empresas cuenten con la asesoría que brindamos en Sirvent & Granados, porque somos expertos en negociaciones que implican un importante ahorro de dinero. ¡Pídenos cita!